Mostrando entradas con la etiqueta Placer. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Placer. Mostrar todas las entradas

Al cumplir mis 36 años (Lord Byron)

 Al cumplir mis 36 años

Lord Byron
¡Calma, corazón, ten calma!
¿A qué lates, si no abates
ya ni alegras a otra alma?
¿A qué lates?

Mi vida, verde parral,
dio ya su fruto y su flor,
amarillea, otoñal,
sin amor.

Mas no pongamos mal ceño!
¡No pensemos, no pensemos!
Démonos al alto empeño
que tenemos.

Mira: Armas, banderas, campo
de batalla, y la victoria,
y Grecia. ¿No vale un lampo
de esta gloria?

¡Despierta! A Hélade no toques,
Ya Hélade despierta está.
Invócate a ti. No invoques
más allá

Viejo volcán enfriado
es mi llama; al firmamento
alza su ardor apagado.
¡Ah momento!

Temor y esperanza mueren.
Dolor y placer huyeron.
Ni me curan ni me hieren.
No son. Fueron.

¿A qué vivir, correr suerte,
si la juventud tu sien
ya no adorna? He aquí tu
muerte.

Y está bien.
Tras tanta palabra dicha,
el silencio. Es lo mejor.
En el silencio ¿no hay dicha?
y hay valor.

Lo que tantos han hallado
buscar ahora para ti:
una tumba de soldado.
Y hela aquí.

Todo cansa todo pasa.
Una mirada hacia atrás,
y marchémonos a casa.
Allí hay paz.

George Gordon Byron  1788 - 1824 Inglaterra
Poeta inglés, mas conocido como: Lord Byron

Oda a la melancolía (John Keats)

 Oda a la melancolía

John Keats

No vayas al Leteo ni exprimas el morado
acónito buscando su vino embriagador;
no dejes que tu pálida frente sea besada
por la noche, violácea uva de Proserpina.
No hagas tu rosario con los frutos del tejo
ni dejes que polilla o escarabajo sean
tu alma plañidera, ni que el búho nocturno
contemple los misterios de tu honda tristeza.
Pues la sombra a la sombra regresa, somnolienta,
y ahoga la vigilia angustiosa del espíritu.


Pero cuando el acceso de atroz melancolía
se cierna repentino, cual nube desde el cielo
que cuida de las flores combadas por el sol
y que la verde colina desdibuja en su lluvia,
enjuga tu tristeza en una rosa temprana
o en el salino arco iris de la ola marina
o en la hermosura esférica de las peonías;
o, si tu amada expresa el motivo de su enfado,
toma firme su mano, deja que en tanto truene
y contempla, constante, sus ojos sin igual.


Con la belleza habita, belleza que es mortal.
También con la alegría, cuya mano en sus labios
siempre esboza un adiós; y con el placer doliente
que en tanto la abeja liba se torna veneno.
Pues en el mismo templo del Placer, con su velo
tiene su soberano numen Melancolía,
aunque lo pueda ver sólo aquel cuya ansiosa
boca muerde la uva fatal de la alegría.
Esa alma probará su tristísimo poder
y entre sus neblinosos trofeos será expuesta.


John Keats, Londres, Inglaterra, 1795 - Roma, Italia, 1821, Poeta británico

Las flores del romero (Luis de Góngora)

 Las flores del romero

Luis de Góngora

Las flores del romero,
niña Isabel,
hoy son flores azules,
mañana serán de miel.

Celosa estás, la niña,
celosa estás de aquél,
dichoso, pues le buscas,
ciego, pues te ve.
Ingrato, pues te enoja,
y confiado, pues
no se disculpa hoy
de lo que hizo ayer.

Enjuguen esperanzas
lo que lloras por él,
que celos entre aquellos
que se han querido bien,
hoy son flores azules,
mañana serán miel.

Aurora de ti misma,
que, cuando a amanecer
a tu placer empiezas,
te eclipsan tu placer;
serénense tus ojos,
y más perlas no des,
porque al sol le está mal
lo que a la aurora bien.

Desata como nieblas
todo lo que no ves,
que sospechas de amantes
y querellas después,
hoy son flores azules,
mañana serán miel.


Luis de Góngora, 1561 - 1627 España.

Una estacion

 ¿UNA ESTACIÓN?

Estación del tren



Hubo un momento en tu vida en que dejaste de soñar, solo dejabas pasar los días, pensaste que ya el tiempo se te había agotado, que la edad era la de sentarse a esperar, si, a esperar, todo había terminado y que solo faltaba que llegara el momento final, d
eprimido, desalentado, desmoralizado.    
De pronto como si un ángel hubiera bajado del cielo, apareció esa persona que entre risas y risas cambió tu vida y no pudiste olvidarla y dejar de amarla, fue un milagro de Dios, el te envió a esa  persona, un ángel que te hizo reír y llorar, habías perdido la comunicación con el sentimiento amor, con el deseo de  abrazar algún día.
Pensaste que todo estaba terminado y hoy te encuentras alentado, haciendo cosas que ya no creías que podrías hacerlo.
Así como la vida cambió en un instante, no olvides que habrá momentos en que lo imposible se torne en realidad.
Nunca dejes de soñar.
Conocer a esa persona fue un regalo de Dios para cubrir una necesidad, "Nadie se cruza por azar en la vida de nadie" todo tiene un motivo, puede que sea una estación como dice P. Coelho, para llenar una necesidad en mi vida, tu trabajo ya esta hecho, entraste en mi vida, para hacerme la vida placentera, diste una cuota de placer, ¿sera por solo una estación? pero ya eres parte de mi vida y gracias por eso, por ser parte, no me lo esperaba, no esperaba a nadie, pero sera solo una estación .... ?
Paulo Coelho dice que hay 3 tipos de cruce, si la persona muere, si es solo una estación o se queda para toda la vida,

Si alguien llama a tu puerta (Gabriel García Márquez)

    Si alguien llama a tu puerta Gabriel García Márquez Si alguien llama a tu puerta, amiga mía,  Y algo de tu sangre late y no reposa En su...