Política o politiquería
El hombre es un animal político: Aristóteles.
Política es el arte de gobernar a los hombres: Platón.
La política es la ciencia que trata de la organización de las sociedades humanas, es el derecho a tomar decisiones en favor de las mayorías de una comunidad.
Todo es cierto, pero hay quienes se aprovechan de la política para engatusar al pueblo, para robar, para enriquecerse, la democracia la confunden con corrupción.
La corrupción no va a acabar con meter presos a unos cuantos políticos, la corrupción es un pulpo de muchos tentáculos y faltarían celdas en los penales para tanta gente.
La corrupción no va a acabar con meter presos a unos cuantos políticos, la corrupción es un pulpo de muchos tentáculos y faltarían celdas en los penales para tanta gente.
Pero hay quienes se aprovechan de la política para lograr intereses personales
Combatir la corrupción es una obligación, el mal uso de la política, creo que es un comienzo, un despertar, ojala siga así, sin cambiar rumbos y que vayan cayendo uno a uno, sin importar si es de izquierda o de derecha.
Y que vuelva la política:
Los hombres de este mundo
que conformamos la sociedad,
distorsionamos la realidad,
elegimos a los políticos
y ellos corrompen y discriminan.
Los domina la ambición
y buscan acumular posición
y con esa aptitud
margina al que no tiene
segregando al que considera inferior.
Los llaman ciudadanos de segunda clase
y divide en clases funestas.
Hoy en día en los países bien organizados son los partidos políticos los que se encargan de llevar por buen camino a sus propios países, se organizan buscando la integración de todos los pueblos del ámbito nacional (suelo patrio), tienen programas y soluciones a los problemas nacionales, planes de desarrollo a corto, mediano y largo plazo, con inversiones saludables y claras; lucha contra los enemigos internos de la patria: la corrupción, reformar el estado cansado y aparatoso por un estado ágil y de apoyo social.
En los países mas desordenados aparecen los caudillos que lo único que ofrecen es pelear contra los monstruos que gobiernan el país, no tienen proyectos, no tiene programas, solo aliados o compadres y fronteras imaginarias.
Hablar de política o religión rompe la quietud hasta del paraíso, en cierto grado también podemos agregar el fútbol.
Inmediatamente se organizan los bandos oponentes y comienzan los ataques cargados de insultos, florecen las bajas pasiones, los oponentes botan humo por las orejas debido a la carga emocional, los que no tienen y los que tienen algo de educación actúan igual de agresivos.
Es una lastima que se ataquen incluso a las mujeres con palabras gruesas e insultos denigrantes, esto ya cruza los limites del fanatismo que se presenta en ambos casos.
En este perfil a pesar que la mayor parte de publicaciones son sobre poesía, defensa de los derechos o contra la contaminación, he tenido o sufrido algunos ataques por parte de algunas personas y causa estupor el tener que leer sus diatribas en contra de los derechos inalienables de opinión, credo, doctrina política y otros que están detallados en la constitución y en la Declaración de los Derechos Fundamentales de las Naciones Unidas.
Antonio Encinas Carranza
